Su infaltable sonrisa, irradia alegría y evidencia su ángel interior. Pamela Barreto Vidal es hoy una revelación del atletismo de Ecuador, aunque ya lleva más de 13 años de transitar por las pistas. Se especializa en las pruebas de medio fondo y es la actual doble campeona sudamericana sub 18.

Durante la temporada 2024, la atleta azuaya se catapultó como la nueva esperanza a fuerza de resultados nacionales e internacionales. En diciembre, se consagró doble medallista de oro en el Campeonato Sudamericano Sub 18, en San Luis, Argentina (fotos).

  • Oro 800m. planos 2:11.99
  • Oro 1.500m planos 4:48.41

Sus primeros correteos

En su mente están intactos aquellos episodios de sus inicios, cuando apenas tenía 5 años. A esa edad, el interés por el atletismo surgió mientras acompañaba a su prima Joselin Vidal a sus entrenamientos.

Todo empezó cuando yo era muy chiquita. Me gustaba mucho lo que hacía mi prima. En ese momento, me parecía algo divertido. Por eso, le insistí a mi abuelita (Zoila Cordero) que quería entrenar, hasta que ella conversó con el profesor Quille.

Sin siquiera sospechar que se trataría de un futuro talento, el entrenador Patricio Quille accedió a que Pamela se uniera al grupo. Claro, al principio con algo más didáctico la motivaron a correr entre juego y juego, por 25 minutos, en el Parque Miraflores, el mismo lugar donde le vienen esos recuerdos ahora. Hasta que el atletismo la cautivó para siempre.

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Tras superarse el encierro por la pandemia de la Covid-19, sus primeras incursiones nacionales fueron en la modalidad de campo traviesa. Pero no fue de su agrado.

Así que prefirió las distancias cortas. Y el entrenador Byron Saquipay, que la dirige desde los 9 años, es quien empezó a perfilar la especialidad en el proceso de su pupila. Un primer ensayo exitoso fueron las pruebas de 600m (1:39.43) y 2.400m (8:11.50) en el Nacional Sub 16 en Guayaquil 2022. Incluso tuvo un paso fugaz por la marcha con una medalla de bronce, en el Campeonato Nacional del 2021 en Macas.

La travesía hacia el podio

Hasta que Saquipay decide que Pamela debe priorizar los 800m y 1.500m. Así el primer desafío lo tuvo en el Campeonato Nacional de Atletismo en Ambato, en el 2022. Sin mayor confianza en sí misma por lo ocurrido en el campo traviesa, participó en la prueba de 1.500m planos y se ubicó en puestos secundarios.

Pero al día siguiente, encontró la revancha en los 800m planos, prueba a la que clasificó con sus 2:19. La pusieron en la segunda serie (a la que van más por una especie de descarte) y se enfrentó a un duelo consigo misma.

«Salí durísimo en la primera vuelta y, a falta de 300 metros, me sentía cansadísima que hasta quería retirarme. Crucé la meta a punto de desmayarme. Hasta que me dicen: ¡Pamela ganaste!». Su marca de 2:18, la puso en el centro del podio, por arriba de las favoritas y a 2 décimas de clasificar a los Juegos Sudamericanos de la Juventud de Argentina.

El siguiente paso lo dio en los XI Juegos Nacionales Prejuveniles 2022. Otra vez los 1.500m, pero está vez con una mejor historia: impulsada por la motivación de su entrenador de entonces, Byron Saquipay, quien no paraba de alentarla «valiente, valiente, estás muy bien. Aguanta, aguanta».

Aún incrédula de la hazaña, Pamela cruzó primera la meta en 4:44. Y en los 800m, ya con más confianza, igual se adueñó del oro (2:16).

El éxito internacional

Esos resultados motivaron a que la Federación Ecuatoriana de Atletismo avalara su estreno internacional. Y ella respondió con una medalla de plata en los 1.500m (4:41.02) y bronce en los 800m (2:13.49) en el Campeonato Sudamericano de Atletismo Sub 18 en Brasil, en el 2022.

Al año siguiente, Pamela integró la Selección de Ecuador para el Iberoamericano de Atletismo Sub 18, de Lima, Perú 2023. Allí, alcanzó dos medallas de bronce en 1.500m. (4:36.36) y en relevos mujeres 4x400m.

También ya tuvo su debut mundialista. Integró el equipo de relevos 4x400m mujeres en el Campeonato Mundial de Atletismo Sub 20, en Lima, Perú, en el 2024. «Fue una participación agridulce», ya que no logró clasificar en su especialidad, pese a que lo intentó varias veces e incluso quedó cerca con sus 2.09.75 frente a la marca exigida de 2.09.00.

Pamela Barreto en su estreno mundialista. Participó en relevos 4x400m mujeres. Foto: Jaime Plaza, enviado especial a Lima.

Sin embargo, se catapultó de forma definitiva hacia el firmamento del atletismo internacional en el 2024, con su doble título de campeona en el Sudamericano Sub 18 de Argentina.

La proyección de su vida

Para Pamela, el atletismo significa un cúmulo de responsabilidades y de constancia. Es un esfuerzo de todos los días, con altos y bajos, pero siempre con la mentalidad positiva y su infaltable sonrisa en cada diálogo.

En medio de esa dedicación, también empezaron los reconocimientos como el del club que la forjó, el Team Saquipay. Además, en el marco de su centenario, la Federación Deportiva del Azuay le rindió tributo al entregarla la presea ‘Jefferson Pérez’, por sus méritos deportivos en las categorías prejuvenil y juvenil.

«Este año (2025) entro a la categoría sub 23 y es un gran reto, aunque igual vendrá un podio en la sub 20». Ahora, bajo la dirección de Celso Cortez, aprovechará su buen momento deportivo para buscar el derecho a competir en pruebas en Paraguay, México, Uruguay y otros países.

Está conciente que aún queda por avanzar «en todo. En las piernas voy bien, pero técnicamente necesito mejorar mucho en los brazos, la posición de la espalda». Su mayor potencial radica en los remates, impulsado por ese espirítu de lucha que la caracteriza.

Y en la vida misma, la proyección de Pamela es seguir vinculada con el deporte. En ese afán, ahora cursa el primer año de Fisioterapia en la Universidad Politécnica Salesiana. «Fue todo un lío descubrir qué quiero en mi vida, porque antes decía que quería ser ingeniera civil porque me gustan mucho los números. Pero al hacerme los test, estos decían deporte, deporte…».

Su familia el pilar fundamental en sus triunfos. Pamela junto a sus papás Walter Barreto y Fernanda Vidal, y su hermana Camila.

Con base en esa convicción, Byron Saquipay la ve a futuro incursionando con éxito en pruebas mayores como la maratón. Ese era el plan que avisoraba hasta antes que Pamela decidiera entrenar con Celso Cortez.

Hasta tanto, Pamela Barreto Vidal seguirá disfrutando mucho de su pasión por el atletismo, en medio del esfuerzo y con el apoyo incondicional de sus padres y su familia. Además, mirando a uno de sus referentes cercanos de éxito, la marchista Glenda Morejón, medallista olímpica y hoy radicada en Cuenca.

Por Jaime Plaza

Más de tres décadas ejerciendo la mejor profesión, con preferencia en el periodismo escrito.

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